Las capas son uno de los elementos principales para poder trabajar correctamente en el editor GIMP, gracias a ellas podemos mover, posicionar e incluso modificar todos los elementos que aparezcan en una imagen.
Si queremos guardar una imagen sobre las capas lo más recomendable es utilizar el formato .XCF, para que así no solo guardemos las capas sino también la imagen completa.
En GIMP podemos crear, modificar e incluso borrar partes de una simple imagen, GIMP tiene un gran gestor de capas propio, se puede acceder gracias al menú de capas \susearrow{}. El gestor también nos permite crear, copiar y borrar las capas a la imagen de inicio.
El icono que aparece dentro del gestor de capas es el encargado de hacer que desaparezcan algunas capas de la imagen. El icono que tiene 4 flechas significa que la capa está enlazada a la imagen.
También es posible ver todos los canales del color rojo, azul y verde en todas las combinaciones.
GIMP tiene todo lo necesario para que aprendas a usarlas sin problemas, quizás al principio te resulte un tanto lioso, sin embargo con constancia aprenderás a manejarlas sin problemas.
Sin las capas nuestra imagen quedaría obsoleta, por lo que es imprescindible contar con ellas, su gestor nos lo pone fácil, y con solo entrar en el menú lograremos con un simple clic editarlas, moverlas, borrarlas o modificarlas.
Si quieres descargar el programa haz clic en el siguiente enlace http://the-gimp.softonic.com/